Pilu fue rescatado de la perrera con solo unos meses y ha estado desde entonces con Irene.
Irene tenía muchos perros acogidos en su casa porque recogía a todos los animales abandonados que veía. Fue denunciada y varias protectoras tuvimos que hacernos cargo de sus perros con urgencia para que Seprona ( Servicio de Protección de la Naturaleza) no se los quitara.
Sus compañeros ya han sido adoptados, quizá porque eran de tamaño más pequeño. Sólo nos queda Pilu.
Llegó un poco asustado a nuestra protectora porque esto era nuevo para él, pero enseguida cogió confianza y ahora se le ve alegre.
Es sociable y juguetón. Solo necesita que alguien se fije en él y le dé el hogar que nunca ha tenido.
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