A Brandy iban a soltarla en el campo junto con Oreo.
Aunque nos pueda parecer una solución, soltar a conejos domésticos en mitad de la naturaleza es condenarlos de una forma muy cruel. La mayoría muere del estrés, de los cambios de temperatura o a manos de un depredador.
El chico que las salvó no puede cuidar de ellas pero está haciendo todo lo posible por encontrar una buena familia.
Tanto Oreo como Brandy son muy sociables y están acostumbradas a vivir juntas, tranquilas y felices.
Recomendamos una adopción conjunta, ya que los conejos no deben vivir solos, pero estudiaremos todas las solicitudes que nos lleguen.
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