Brisa y Karla han vivido juntas toda la vida. Su penoso pasado solo ellas lo saben, pero si nos lo hacen entender con su actitud y sus movimientos.
Podemos decir que están empezando a ver un mundo que no conocían, asi que el trabajo con ellas es muy importante. Con mucha ilusión vemos sus progresos y son lentos pero seguros.
Ambas son muy sensibles y hoy por hoy se necesitan ya que son lo único que conocen en esta vida. Su adopcion puede ser por separado siempre y cuando haya otro animal seguro de sí mismo en el hogar (ya que entre iguales el aprendizaje y confianza es más fácil) y no vivan en zonas concurridas de tráfico o gente.
La actividad de Brisa es media, y la de Karla es media-alta, además Karla empieza a pedir timidamente caricias de personas con quien tiene vínculo. A Brisa le está costando un poquito más pero seguro lo logrará muy pronto porque sabemos que tiene ganas de recibir cariño. Ambas se desenvuelven sin dificultades con otros perros y se sienten seguras con ellos.
Es importante una casa para que la rehabilitación sea más rápida, la Protectora además ofrece soporte con un profesional.
No tengais miedo al reto de ayudarlas a confiar y a devolverles la ilusión, ellas os enseñarán lo maravilloso que le habréis hecho su mundo...
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