Me llamo viko, tengo 4 meses, cuando nací vivía en una colonia con más gatos, pero tenía frio, hambre y un dolor muy fuerte, cada día que pasaba, más me dolía, casi no me podía mover por culpa de un bulto que me salía de la barriga y un dolor insoportable en los testículos.
Un día me llevaron de la colonia a un lugar calentito, allí una tal veterinaria, dijo que estaba muy grave y que si no me operaban moriría, pero yo no quería morir…
Estuve allí bastante tiempo después de la operación, me dolía pero con algo llamado medicamentos cada vez me dolía menos, ahora estoy perfecto.
Me encanta jugar, estar con mas gatos y soy suuuuper cariñoso, pero aun así aún sigo aquí, dicen que con suerte iré a vivir con una familia y eso me hace feliz, cada día sueño que por fin viene esa familia que será mía para siempre.
