Estas dos miniaturas negritas fueron rescatadas de un gallinero abandonado donde su mamá los había dejado desatendidos, por suerte una de nuestras voluntarias que vive al lado escuchó los maullidos desesperados y consiguió sacarlos de allí.
Ahora están siendo alimentados a biberón gracias a otra de nuestras compañeras y ambos están creciendo sanos y a salvo.
Utilizamos cookies propias y de terceros para fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Clica aquí para más información .