A Nena la rescató una chica una fábrica abandonada en un pueblo de Toledo. Tenía chip, según el cual pertenecía a un cazador, que nos la cedió sin problemas. Venía llena de tumores, y la esterilizamos enseguida para poder quitárselos.
Es súper dulce y muy sumisa. Deben haberla maltratado bastante porque venía muy triste y a cualquier movimiento brusco se agacha, pero es incapaz de defenderse ni hacer un mal gesto. Es estupenda con otros perros y con gatos.
Utilizamos cookies propias y de terceros para fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Clica aquí para más información .