Ferrari llevaba desde ayer 6 de octubre abandonado en un pueblo sin que nadie le prestara auxilio o cobijo. Hasta que el primo de una compañera se lo ha llevado a casa, hemos buscado y logrado acogida y nos hemos podido hacer cargo de su custodia. Lo hemos llevado al veterinario porque estaba lleno de cicatrices. Es un perro muy bueno, cariñoso, tranquilo y dócil. Se lleva bien con otros perros. Pesa 11 kilos y medio. Buscamos un hogar definitivo para él. Se entrega con chip, vacuna de rabia, vacuna heptavalente, desparasitaciones interna y externa, pasaporte, esterilizado y revisado por el veterinario.
Utilizamos cookies propias y de terceros para fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Clica aquí para más información .