Daisy es una gata muy tranquila. La encontramos en la calle y sólo quería que la acariciaran.
En seguida nos percatamos de que había sido abandonada. La pobre no se quedaba donde le poníamos de comer, si no que nos seguía.
En plena ola de frio la recogimos porque pensamos que igual no la pasaría.
Es muy dulce y melosa. Se pasa las horas durmiendo al Sol. Todo lo que quiere es sentarse sobre ti, amasar con sus patas y dormir contigo. Es muy afectuosa y comilona.
No entendemos cómo pudieron abandonar a una gata tan mimosa y tranquila. Es una excelente compañera que merece vivir en un hogar donde la mimen mucho.
Utilizamos cookies propias y de terceros para fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Clica aquí para más información .