Estuve viviendo toda mi vida con mi dueño, pero se hizo mayor como yo.
Escuché que lo ingresaron por temas de salud y me quedé sola.
En la Casita de Arda tengo un hogar donde me cuidan y me dan cariño, al principio no sabía muy bien que pasaba y porque estaba aquí. Ahora sé que me van a cuidar y querer mucho. Puedes APADRINARME para que se puedan hacer cargo de mi.
Utilizamos cookies propias y de terceros para fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Clica aquí para más información .