A Kenna se la encontraron cuando era apenas una cachorra con mucho miedo. Es una perra juguetona y cariñosa, pero sigue sin adaptarse del todo a vivir en un piso. Sus actuales dueños piensan que sería más feliz en un campo.
Utilizamos cookies propias y de terceros para fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Clica aquí para más información .