Arrow ha conocido el abandono siendo sólo un cachorro. Lleva desde julio de 2019 con nosotros.
Como buen jovenzuelo está lleno de energía, y entre carrera y carrera siempre se acerca a las voluntarias a pedir una buena dosis de mimos y caricias. Se merece un dueño estupendo que le lleve a dar largos paseos y se convierta en su mejor compañero.
¿Nos ayudas a evitar que crezca en un albergue?
Utilizamos cookies propias y de terceros para fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Clica aquí para más información .