Lola pasó mucho tiempo en la calle. Mucha gente la vio y le hizo fotos en Aspe, en La Romana y en Novelda, pero nadie la rescató. Afortunadamente unas buenas personas se cruzaron en su camino y Lola se dejó ayudar sin problemas. Estaba hambrienta, cansada de tanto caminar, y con unas ganas de cariño tremendas. Ahora se encuentra junto a ellos, esperando ser adoptada por una buena familia.
Lola es una perra tan grande como noble y buena. Se porta de maravilla, es muy obediente y lista. En casa no da nada de trabajo, es muy tranquila y sólo quiere mimos de vez en cuando. Con el resto de perros tiene buena relación. Sabe pasear con correa sin tirar, y hacer sus cositas en la calle.
Si estás interesado en adoptar a Lola, escribe a adoptamics@adoptamics.org o bien rellena el cuestionario que aparece debajo de esta ficha.
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