Confuncio fue arrojado a un contenedor de basura cuando sólo contaba con unas horas de vida. Si no llega a ser encontrado, habría muerto en cuestión de minutos, pero afortunadamente su rescatadora lo ha criado a biberón y él ha crecido sano y feliz. Confuncio ya come solito, y es el momento de buscar un hogar definitivo para él.
Confuncio es, además de un cachorro precioso, un perrito muy juguetón y espabilado. Con las personas es muy bueno, y con el resto de perros también tiene muy buena relación.
Si estás interesado en adoptar a Confuncio, rellena la solicitud de contacto que aparece debajo de esta ficha.
Utilizamos cookies propias y de terceros para fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Clica aquí para más información .