A Elly estuvieron a punto de atropellarla porque estaba deambulando por la carretera y cruzando de un lado a otro, y estas mismas personas que casi la atropellan se compadecieron de ella y la recogieron, pero no se la pueden quedar y nos han pedido que le busquemos una buena adopción.
De carácter, Elly es un dulce. Cariñosísima, encantadora con niños, sumisa con otros perros... y a los gatos no quiere ni mirarlos del respeto que les tiene. Es tranquila, hogareña y limpia. Lo dicho: ¡un dulce!
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